Para los que no lo conozcan, Ángel Miranda es el guionista detrás de los cómics: ‘Lezo’ y ‘Espadas del fin del mundo’, además del autor de ‘Carrión’, el mayor crowdfunding para una novela en España. Hoy nos lleva a través del proceso de su nuevo cómic basado en las hazañas de Diego García de Paredes.
Te preguntaría qué te inspira para crear, pero evidentemente es la historia… lo que me pregunto realmente es, ¿cómo logras convertir la historia en un éxito editorial?
La historia es apasionante, especialmente la historia de España en los siglos XV, XVI y XVII, llena de aventureros y luchadores intrépidos. Intento llevar a cabo una combinación entre diversión, espectacularidad y rigor histórico que suele ser difícil de encontrar. Hay autores que prescinden del rigor y ni siquiera lo advierten a sus lectores, en el peor de los casos ni siquiera son conscientes de ellos, otros tienen grandes conocimientos documentales pero no atinan a crear personajes y argumentos sólidos. Humildemente, intento trabajar al máximo ambas facetas y creo que es una fórmula que mis lectores aprecian.
Esto que voy a decir es cierto, porque cada vez que un proyecto de Ángel Miranda sale a la luz, los aficionados a la historia y al cómic en general se dan la mano deseando abrir las páginas de lo que pretendes lanzar. ¿Qué elementos clave crees que contribuyen al éxito de tus creaciones?
Busco ofrecer obras de la mayor calidad posible, tanto en el contenido como en el acabado. Intento crear lo que a mí me gustaría disfrutar como lector y aficionado. Una buena historia, una buena documentación y una buena presentación. Para ello me rodeo del mejor equipo posible, desde mi compañero historiador Ramón Vega hasta los mejores dibujantes posibles. El resultado son obras de una factura que no se suele ver en el género histórico a nivel nacional.
¿Cómo equilibras la creatividad con las demandas comerciales del mundo del cómic?
Somos extremadamente rigurosos con los sucesos reales, el contexto y la ambientación, pero eso no significa que debas ser aburrido o que estés limitado. Todo lo contrario, aporta valor a la obra saber que realmente todo sucedió así. Ahora bien, para lograr que algo riguroso sea al mismo tiempo divertido y espectacular es necesaria una ardua investigación para encontrar los elementos que te interesan, que alimentan a la trama, y un buen trabajo puliendo y dando coherencia a personajes, argumentos y tramas. Afortunadamente, el público al que nos dirigimos sabe valorar este esfuerzo.
Hablemos de tu nuevo proyecto «Paredes. La Leyenda» ¿Cómo surgió la idea de crear un cómic sobre Diego García de Paredes?
Queríamos hacer algo que, sin dejar de ser histórico, fuera un poco más desenfadado. Al mismo tiempo siempre habíamos tenido la época de los Tercios en el rabillo del ojo. Paredes es perfecto para saltar a las viñetas porque combina un personaje real cuya presencia en batallas y momentos históricos está documentada, con crónicas exageradas que convertían sus hazañas en leyendas. Esta mezcla nos ha permitido hacer un cómic divertido y trepidante sin dejar de lado una férrea documentación de época para las batallas, fortalezas, equipamiento, personajes, etc.
¿Cómo fue el proceso de investigación para asegurarte de que la obra fuera rigurosa históricamente?
Yo he leído todo lo posible hasta donde puedo llegar como aficionado a la historia, pero para ser totalmente riguroso cuento con Ramón Vega, un historiador con vastos conocimientos sobre el periodo y la materia. Podrían pensarse que por ser un cómic tenemos más margen a la inventiva, pero en realidad es todo lo contrario. Al tener que mostrar con imágenes todo lo que pasa, el proceso de documentación es titánico para ser fieles a la realidad. Cada viñeta requiere de búsquedas de información ingentes. Cada acción nos obliga a investigar y mostrar exactamente cómo habría sido. No es lo mismo escribir «subieron la muralla y asaltaron el castillo» que pararse a pensar cómo demonios harían eso con los recursos de la época y los materiales cercanos. Por no hablar de la reconstrucción de cómo sería la fortaleza en ese momento.
Por lo que he podido ver, cada parte del cómic ha sido realizada por un equipo diferente de dibujante y color ¿Cómo fue trabajar con los artistas y otros miembros de tantos equipos creativos en este proyecto?
Tan gratificante como intenso. Ramón y yo trabajábamos y supervisábamos tres capítulos a la vez, las entregas de páginas se superponían y nos obligaba a tener la mente en distintos momentos cronológicos a un tiempo. Por fortuna, todos los artistas han realizado un gran trabajo y han accedido de buen grado a cuidar los detalles documentales que necesitamos. Trabajamos con una especie de pizarras virtuales en las que podemos mostrar toda la documentación gráfica necesaria para cada página, y donde podemos comentarlo todo y anotar correcciones de forma clara y visual. Obra tras obra, vamos mejorando el proceso.
¿Qué desafíos enfrentaron los artistas al ilustrar las batallas y escenas de acción en el cómic?
Por cada escenario, por cada personaje, por cada página e incluso por cada viñeta tenían alrededor una nube de ilustraciones, grabados y pinturas de época. Por una parte, les ofrecemos toda la información que podemos para que ellos no tengan que buscar nada, por otra, a veces pueden verse saturados. Al principio se les hace algo duro, pero en cuento entran en calor y se hacen con la época, las armas o los escenarios disfrutan jugando a realizar las reconstrucciones históricas que planteamos. Cuando terminan son conscientes de que han creado algo especial, algo que va a perdurar, y creo que se sienten satisfechos por su trabajo.
¿Qué papel juega el humor en la obra?
Este cómic tienen más humor que los anteriores gracias a las hazañas desmedidas y al carácter bravucón e insolente de Paredes. Las páginas están llenas de ocurrencias y momentos divertidos, al igual que de un lenguaje de época lleno de improperios que hemos puesto en boca del Sansón de Extremadura. Creo que los lectores se van a sorprender con cómo es posible hacer una obra rigurosa con el periodo y al mismo tiempo canalla. Los prontos de Paredes no tienen precio.
¿Cuál es tu personaje favorito en la obra, y no vale paredes, claro, y por qué?
Aparece el Gran Capitán… pero he cogido cariño al hermano de Paredes. El pobre no deja de verse entrometido en numerosas refriegas y percances por culpa del carácter iracundo y explosivo de su pariente. Intenta llevar a ambos por el buen camino, pero las cosas siempre se acaban torciendo con resultados inesperados. He disfrutado mucho creando discusiones y momentos tensos entre ambos, son una gran pareja de personajes.
Ahora vamos a intentar descubrir qué hay detrás de une mente como la tuya, primera pregunta importante: ¿Cuál es tu cómic favorito de todos los tiempos?
No soy una persona de favoritos, me gustan tantas obras… pero te diré uno de ellos: Corto Maltés. Me fascina cómo Hugo Pratt era capaz de mezclar momentos y personajes históricos con historias llenas de aventura, personajes memorables, magia y valor literario. Hay historias que triunfan durante sólo unos años, mientras están de moda, pero Corto será inmortal.
¿Y tu película?
Pese a que no te va a sorprender, destacaría ‘Master and Commander’. Todo lo relacionado con la historia naval me apasiona, no puedo remediarlo. Ojalá se hicieran más superproducciones históricas con esa calidad, y ojalá alguna de ellas narrara alguno de nuestros pasajes. En cualquier caso, soy bastante ecléctico en mis gustos cinematográficos, me vale tanto la acción como el humor o el drama mientras se sustenten en un buen guion.
¿Qué otros proyectos creativos tienes en mente para el futuro?
El más inminente será la segunda parte del cómic de Lezo, largamente esperada. Ya estamos en la recta final para terminarlo. El siguiente será la segunda parte de Carrión, mi novela, para la que ya tengo hecho el trabajo de investigación. Ahora me toca sentarme a escribir. Después, quién sabe, las ideas en el cajón son muchas y el tiempo limitado, desafortunadamente.
Finalmente, ¿qué consejos le darías a alguien que quiere escribir su propio cómic histórico?
Primero, que piense muy bien qué pasaje quiere contar. Hay multitud de batallas y personajes increíbles, pero no todos son fáciles de adaptar a un buen argumento. Que sea una gran batalla o un gran general, que sea interesantísimo documentarse sobre ello, no significa que vaya a ser atractivo narrativamente hablando. Una vez encuentre su historia, que investigue hasta que no pueda más y que se rodee del mejor equipo posible. Por último, que no se desanime ante lo complicado del mercado o las ventas. Lamentablemente el número de ejemplares vendidos muchas veces depende más del marketing que da la calidad. Lo importante para un autor debe ser crear una gran obra a su propio juicio.
Puedes contribuir al crowdfunding de Paredes, la leyenda aquí.