Es probable que la inmediatez sea una de las palabras que mejor definen a la sociedad occidental de hoy. Todo parece encaminado a eliminar esperas, a suprimir ratos en blanco, a no desaprovechar ni un minuto del día, a tratar de llevar a cabo el máximo en el mínimo tiempo posible. La tecnología es la gran aliada; lo útil, la mayor atracción. Los resultados a corto plazo le ganan a menudo el pulso a la reflexión, y el consumismo parece no conocer límites.
En este contexto, casi ni sorprende el hecho de que el hombre haya perdido el protagonismo en el ámbito empresarial y financiero. Casi ni suena a perogrullada señalar que las empresas están formadas por personas. Y que las personas no son pseudorobots que simplemente ejecutan tareas para las que se han especializado. Conforme van pasando los años, se hace más evidente que la formación técnica nunca es suficiente, y además con frecuencia queda pronto obsoleta.
Como respuesta a esa carencia, a esta deshumanización, nació Virtus Universitas: una escuela que busca restaurar la formación humanística especialmente en aquellos campos en los que cayó hace tiempo en el olvido. Surge con la idea de que las crisis de los últimos lustros son, en definitiva, crisis humanas. Por regla general, la empresa tiende a invertir en más instrucción técnica y, en estos tiempos de cambio, Virtus apuesta por lo permanente. Invertir en lo permanente se traduce en fortalecer los cimientos de aquello que somos, significa apostar por un conocimiento profundo del hombre y del mundo. Las humanidades proporcionan la clave para resolver los problemas humanos desde sus causas y fomentan las características que le son propias a la persona, como la empatía o la espontaneidad. Por lo tanto, el arte, la literatura, la historia, la cultura no son campos ajenos al mundo empresarial o financiero, sino que forman intrínsecamente parte de ellos.
La formación allende la productividad técnica
De primeras, puede sonar como una quimera inútil porque no ofrece resultados inmediatamente palpables. Sin embargo, Virtus Universitas sostiene que los valores humanistas sirven para potenciar habilidades empresariales -la rapidez de pensamiento, la comprensión, la capacidad de relacionarse, de comprender- que se traducirán en el medio-largo plazo en resultados de éxito. En Virtus afirman que los retos en la empresa serán más abordables si se cuenta con un fundamento sólido en humanidades, ya que “si las empresas complementan la formación técnica con la formación humana, sabrán discernir y emitir juicios que permitan responder con dinamismo a los problemas del equipo”. Por otro lado, “las humanidades son un asidero firme y estable de conocimiento ante los vaivenes del mundo moderno y no sólo potencian el pensamiento creativo o la adaptación ante los distintos ambientes, respuestas rápidas pero profundas; sino también una visión de altura y de conjunto sobre los muy variados retos humanos, y nuevas y variadas soluciones”. Para resumir bastan tres palabras: criterio, estabilidad y perspectiva.
En Virtus Universitas ofrecen por el momento un curso bajo el nombre ‘Empresa y persona’ (un programa con siete clases magistrales presenciales, seis horas de videos disponibles de forma permanente en la plataforma y quince horas de material adicional) y otro llamado ‘Regala valores’ destinado no únicamente a empresas sino al público en general y que busca poner en relieve valores como la excelencia, la integridad, la honestidad o el respeto (se lleva a cabo mediante dos sesiones magistrales y veinte vídeos cortos que giran alrededor de la mitología, la historia, la filosofía y la vida militar).
Detrás de este proyecto están tres jóvenes -jóvenes de verdad, ninguno ha cruzado la treintena- preocupados por un problema que consideran que es de fondo y con el deseo de hacer mejores a las empresas en particular y a la sociedad toda de nuestros días. Pelayo Bolívar, Ramón de Meer e Ignacio G. Toledo son los fundadores y socios que forman, junto a un consejo académico y otro empresarial, y un amplio grupo de profesores de todas las áreas humanísticas, Virtus Universitas.